Ἥλιος γὰρ οὐχ ὑπερϊήσεται μέτρα· εἰ δὲ μή, Ἐρινύες μιν Δίκης ἐπίκουροι ἐξευρήσουσιν.
El Sol no rebasará sus medidas. Pues si no, la Erinias, defensoras de la Justicia, darán con él.
Heráclito (Fragmento 94: Plutarco, Sobre el exilio, 604A-B)
Postrado en la cama, las horas pasaban sin que el reloj las marcara. La memoria tampoco daba resguardo al paso del tiempo.
Solo quedaban las úlceras en las piernas y el amor por los números, vestigios de su pasada profesión de contador.
Cada día contaba números hasta quedar dormido y aún no había llegado a la infinita desesperanza.
Entre bocados de papas majadas y habichuelas tiernas (de lata), contemplaba la epifanía numérica que anticipaba a la muerte.